CIRCO PARA NIÑOS
Ser profe de circo para peques, es una experiencia súper gratificante. El circo es un espacio donde la creatividad y la imaginación no tienen límites. Cada clase es una oportunidad para explorar, desde un enfoque lúdico, diferentes disciplinas como malabares, equilibrios, expresión corporal, acrobacias, aéreos… Me encanta ver cómo se sumergen en este mundo, descubriendo nuevas habilidades y desafiando sus propios límites.
Además, trabajar con peques, me permite ser parte de su proceso de desarrollo personal. El circo no solo enseña destrezas físicas, sino también valores fundamentales como el trabajo en equipo, la perseverancia, la confianza en uno mismo. Ayudar a los niños a superar sus miedos y a celebrar sus logros, por pequeños que sean, es muy enriquecedor.
Ser profe de circo me permite también, mantener viva mi propia pasión por esta práctica. Cada día aprendo algo nuevo junto a mis alumn@s, lo que me motiva a seguir explorando y mejorando mis propias habilidades. La conexión que establezco con ellos es invaluable; juntos compartimos momentos de alegría, superación y creatividad.